Personales

Ante la carrera más antigua de España: Jean Bouin

No tuve dudas cuando leí que era la carrera más antigua de España; esta es la 99,

La portada ya te anima a que te inscribas y seas tú el que la realices como esos dos jóvenes. Una vez terminada, a buen seguro, que empiezas a pensar en la 100. La voluntad es primordial en el atletismo, el sí puedo debe ser una constante.

Con el espíritu de un joven primaveral comencé la carrera, consciente de que iba a disfrutar por las calles más emblemáticas por la ciudad de la cortesía-como escribió Cervanes-, Barcelona. Más de 10.000 personas nos dimos cita en el «Nou Circuit» a los pies de la avenida de Reus i Taulet; torcimos por C. d´Estenca, para después a travesar la larga Gran Vía y pasar por Passeig de Sant Joan y dirigirnos en la dirección del Arc de Triomf, y así por calles más estrechas, pero llenas de tradición y sabor a antigüedad llegamos a la Placa de Colón y después la señalada e histórica Av. del Paral.let, y a la altura del número 172 torcimos a la izquierda para adentrarnos por las calles Tamarit y Lleida, y finalmente, otra vez, la recta de la avenida » Reus iTaulet» en donde estaba la meta, y es aquí donde el púbico se atrevió a recibirnos con aplausos calurosos, que eché de menos en el resto de la carrera, salvo en algunas calles más estrechas con aplausos tibios y un ánimo Félix; probablemente alguien que me conocía o había sido su profesor; pero esto no resta para que recuerde esta mítica carrera; y tal vez como el año que viene es la 100, Mundo deportivo eche el resto para que se convierta en única por si faltaba algo.

Como dije en el twitter me lo pasé en grande por el recorrido y fui feliz, y eso sí, el paseo por la «Rambla» me hizo recordar los tiempos estudiantiles y la fuente de Canaletas en la que casi era una obligación beber algo como señal de que suponía una nueva visita; en esta ocasión no bebí, pero en el fondo hay un espíritu que lo haré con una nueva carrera, que seguro será grandiosa. Me llamó la atención solo ver una «estelada» en el cuarto piso en la misma calle, y en la manzana siguiente, en la que está el Gobierno de la Generalitat Me cabe hacer constar, también, el trato que recibí de una de las nietas de Luis Chamizo, catedrática de la Universidad de Barcelona y su pareja economista. Gracias por la conversación y. cómo no, al restaurante que habían reservado en el que disfrutamos de una comida excelente.


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Homenaje a Almudena Grandes en el Ateneo de Madrid

Ayer en Barcelona; un día en donde disfruté y fui feliz. Por lo noche, a última hora, arribo al «rompeolas de todas las Españas» y al bajar del AVE leo: Madrid Puerta de Atocha Almudena Grandes; inmediatamente me viene a la memoria que al día siguiente a las doce tenía un asiento reservado en el salón de Actos del Ateneo de Madrid para asistir al Homenaje a Almudena Grandes. Efectivamente, en la fila 5, en la primera butaca estuve sentado; un sitio privilegiado para ver el escenario en el que se desarrollaría. Dos horas en las que el público asistente escuchó y aplaudió palabras certeras de los que participaron. Solo voy a citar a los dos últimos Luis García Montero y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En cuanto al director del Instituto Cervantes, solo nombrarlo, nos evoca poeta y, sobre todo, aquel libro que ha quedado en las mentes de las personas como un canto al amor: Completamente viernes. El mismo que depositó en el ataúd al final del entierro. Es un libro hermoso, amoroso; es un completamente tú. El final ya lo conocemos en el último libro del poeta, Un año y tres meses. Me lo leí de un tirón, casi como una novela; en verdad cuando terminas los ojos desprenden acuosidad. La sentimentalidad nos inunda.

En cuanto al presidente del Gobierno, me ha sorprendido esas palabras cálidas, ese saber estar con que nos dibujó a Almudena, Pero hubo dos ideas que quiero esmaltarlas en este «blog»: una, que se haría socio del Ateneo; en ese mismo instante empecé a aplaudir y unos segundos después, alguien de la otra parte prosiguió, y acto seguido el resto de los/as que abarrotaban el salón de Actos. Y la otra idea fue que citara al más grande escritor que vieron los siglos después de Cervantes: Galdós. Y más me sorprendió que recurriera al discurso de entrada en la Real Academia Española, leído el domingo 7 de febrero de 1897, con el título «La sociedad presente como materia novelable». Grande, Presidente; en los pocos ratos de ocio que tenga, lea a Galdós. A parte de que le aprovechará, también le embelesará y no haga caso a los que hablan de oídas, que estos abundan. No olvide que Almudena, además de novelista, fue galdosiana y ateneísta-muy tardía- pero entró en la «docta casa». Precisamente, recuerdo que nos conmovió en la conferencia que impartió en este templo intelectual con ocasión del centenario de la muerte del escritor.

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Cross de la Universidad Alfonso X el Sabio

En este curso es el séptimo que se realiza; en general, los que participan son jóvenes primaverales, pero los que llevamos varios años tenemos adicción, quedamos pocos los que ya hemos cumplido años, pero contribuimos a que estos cross prosigan y crece una alegría enorme al contemplarnos con las manos o la mirada.

En una mañana propia del otoño, con mucho viento y frío, soleado, comenzamos a la hora prevista los 6 kms. del cross. Vamos avanzando en las formas: salimos juntos mujeres y hombres; esta modalidad ya lo solíamos comentar al finalizar las carreras hace años: por el momento, solo algunas universidades han entendido los motivos; no tenía sentido la división y la espera a que terminaran «las chicas» (término común que se oía por mujeres), El paisaje, aun siendo distinto, te anima a que continúes y saques fuerza de voluntad, primordial en el atletismo. Me sorprendió que solo participaran 204 personas; por cierto, como siempre abundaron más los populares que los / las universitarios. El próximo será el día 26 en el CEU. Me lo perderé porque participo en la carrera más antigua de España, en Barcelona: Jean Bouin, la 99. Será el día 27 de este mes de noviembre.

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XXVII Cross universitario del Rector de la U. Nebrija

Con ilusión, la mañana del sábado, nos dimos cita para participar, un año más, en uno de los cross más emblemáticos en el umbral de la sierra madrileña; con llovizna y frío íbamos llegando para recoger el número de dorsal y la camiseta; casi doscientos estudiantes y personas que ya hemos cumplido esa etapa, pero con el anhelo juvenil de proseguir estas carreras llenas de gozo, de primavera. Me sorprendió que este curso no hubiera más gente; tal vez la distancia -La Berzosa- o la esperada lluvia.

A la hora prevista, tanto mujeres como hombres, aunque en este cross ellas salieron primero -en el de la universidad de Comillas se salió juntos- y casi ya sin llovizna que nos respetó hasta que el último corredor llegó a meta, se comenzó con la alegría que se deposita en la mente; al final, cayó una fuerte nube, y más tarde el sol. No podía faltar el entorno paradisíaco esmaltado de hierbas, jaras, tomillos, encinas (en castúo carrascos), etc., y ese aire purificador que nos acompañó en todo momento y nos embriagó con ese olor placentero que deslizaba la conjunción de la humedad de la tierra, las plantas y árboles, en el que predominó, sobre todo, el de las húmedas jaras. Mi más sincera enhorabuena por la organización y el respeto entre las personas.

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De Palma de Mallorca a Cuenca, «flor de senderos».

Aunque había estado en Palma de Mallorca, de vacaciones, cuatro veces, nunca había participado en la fiesta del atletismo, como es los/as que con sol, lluvia, nieve o frío, se lanzan a correr por las calles a festejar los lugares más importantes de las ciudades. Este año no se me podía escapar porque me coincidía con puente y la llamada «fiesta de la Hispanidad». Cuatro días eran ideales. Jamás pensé que con los que participábamos me hiciera recordar lo que se aprendía ya de pequeño con la expresión «Torre de Babel». Y efectivamente, allí nos dimos cita-me refiero a la carrera Zafiro-Palma- alemanes, ingleses,, franceses, finlandeses, portugueses, suecos, etc., y la algarabía de los italianos, sobre todo italianas, casi en grupos, que se dejaban notar por hablar en alta voz. Los que más, sin duda, los alemanes. Las lenguas proliferaron no solo en la carrera, también por las calles, en las compras, en los hoteles. Sinceramente en castellano poco; pero, sí la lengua gallega, valenciana, catalana, mallorquín, y probablemente otras.

Y cómo no, a mi vuelta de Palma, no podía perderme la carrera de Cuenca el domingo 23 de octubre. Esta ciudad artística, desde donde la mires, te hace volver, con esos dos ríos emblemáticos, el Huécar y Júcar; en otoño. se corre la media maratón y los diez kilómetros por esos senderos de una belleza paradisíaca y, sobre todo, con el río Júcar que te acompaña hasta la ciudad; la frondosidad de todo el recorrido y la mayor parte mirando al río con caudal lento y lleno-de color verdoso-, sientes ese espíritu de tranquilidad, de sosiego en un día nuboso, pero a ratos con viento huracanado el día de la carrera.

Entrada en lo que fue iglesia de San Pablo. Escrito de la «Fundación Tórner».

El sábado, sin embargo, la ciudad recibía a sus habitantes con un sol espléndido y los turistas se agolpaban por la catedral, las casas colgadas, el puente san Pablo y la que fue iglesia San Pablo, en la «Hoz del Huécar», donde los dominicos al lado construyeron un convento en el siglo XVI que en los siglos venideros regentaron los PP. Paúles, y ahora un Parador en que es muy difícil-sobre todo fines de semana y fiestas de guardar- reservar habitación. En esta iglesia de San Pablo vi dirigir a la orquesta de RTVE por el director ruso Ígor Markévich , solo su presencia y el movimiento de brazos y cuerpo parecía como si entrases en el reino de los cielos con unas voces que parecían habían venido de otro mundo angelical. Fue la perfección suma. Ahora, la iglesia de San Pablo, se ha convertido en un centro cultural, en esta ocasión, llamado «espacio Torner» que merece la pena visitar por su presencia evocadora en el que te hace reflexionar y pararte a meditar ante lo existencial.