Uncategorized

El nuevo lector: de la narrativa romántica al realismo en Europa 5

La aportación de la novela realista francesa a la literatura de otros países no admite, hoy, dudas. HENRI BEYLE ( Stendhl, nombre de un pueblo alemán que él adoptó para la posteridad, 1783-1842) contribuyó a la expansión del realismo. Stendhal consigue pasar a la posteridad con dos novelas: El rojo y el negro (1830) y La cartuja de Parma (1839). En cuanto a la primera novela recoge el tema de los diarios, y a partir de ahí construye la trama novelesca. Los personajes se describen a través de soliloquios.

La crítica se pone de acuerdo en que lo que llama la atención en los lectores de hoy es su estilo penetrante, seco, frío, inteligente, tenso, analítico. Stendhal sintió la literatura como nadie y quizá sea eso lo que le hace impermeable a cualquier época, lugar o sociedad. Su capacidad de observación y la fuerza objetiva con que narra ciertos pasajes nos conducen inexorablemente al realismo crudo. Detestó lo inauténtico y le horrorizaron los sentimientos y las ideas convencionales.

 HONORÉ DE BALZAC  es otro de los destacos del realismo francés, e incluso se le describe como «el gran maestro de la novela realista»; con su literatura se acerca a los tipos y problemas de las diferentes clases sociales, especialmente la burguesa, en su obra más conocida: La Comedia humana. Pero en su novela, en general, recoge los aspectos filosóficos, las costumbres, lo social y lo económico. Su intención, en fin, era «expresar su siglo». Su capacidad de observación y su fecunda imaginación crearon más de dos mil personajes. A diferencia de Stendhal, los personajes de Balzac los moldea él, no deja que sean ellos los que se caractericen. Estamos ante un escritor omnisciente. Otra técnica de Balzac es presentar los mismos personajes en varias de las novelas que forman La Comedia humana, parece como si los personajes le pertenecieran.

En el escritor realista-francés se han observado ciertas analogías entre Flaubert y él. Tienen un origen burgués similar; una precoz vocación literaria, sus musas son  mayores que ellos. Pero también existen diferencias. Flaubert es un intelectual y Balzac es más de acción. En Balzac predominan las descripciones generales y largas mientras que en Flaubert las descripciones son profundas y más cortas. Y «la estilización de lo real -escribe Germán Palacios- , que es lo que verdaderamente define la obra de arte, no alcanza en balzac la categoría que tiene en Flaubert, cuyo estilo es claro como un espejo que refleja limpiamente su pensamiento». Quizá se el escritor  que más influyó en la novelística inmediata española posterior, sobre todo en Pérez Galdós, Pereda, Alarcón y Palacio Valdés.

GUSTAVE FLAUBERT  es probablemente el novelista más estetizante del realismo francés. Se le considere como un estilista de la novela y, al mismo tiempo, un defensor del arte por el arte. Parte de la crítica incluso va más lejos al reconocerlo como el mejor novelista de su siglo.  Su marco referencial es Madame Bovary. La obra fue considerada en su día como inmoral y su autor fue procesado juntamente con el editor y el impresor; después serían absueltos. También se ha dicho que Leopoldo Alas «Clarín» tomó como modelo esta novela para escribir La regenta. La trama de la novela es muy sencilla. Madame Bovary  es la esposa de un médico de provincias. Se dedica a leer mucha literatura romántica, y como consecuencia piensa que la vida que lleva es un aburrimiento. Cree que merece otra mejor. La solución momentánea la hallará en nuevos amores, pero también éstos la conducirán a la frustración y luego al suicidio. La novela tardó cinco años en escribirla; producía una página por semana para llegar a la suma perfección estilística.

El otro referente flaubertiano fue su nueva versión de La educación sentimental. No tuvo la fama de Madame Bovary pero también puede entrar en el cuadro de honor de la novela realista. Es un libro de pasión, de una historia de amor pero sin llegar al adulterio. A La educación sentimental se la ha considerado como la síntesis entre las  «contradictorias tendencias de Flaubert: después de esa novela vuelve al ideal esteticista, que en forma extrema, confiesa que sería un libro sobre nada, un libro sin vínculo exterior, que se sostendría por sí mismo por la fuerza interna de su estilo».

 EMILIO ZOLA es el novelista más conocido y de mayor influencia  en la narrativa realista europea en la segunda mitad del siglo XIX. Con su forma de ver la realidad -a través de la observación y la documentación- nos conducirá a otra corriente literaria: el Naturalismo. Su afán consistía en tratar de incrustar en la novela el método experimental de la ciencia para mostrarnos los avatares de la personalidad debidos a la herencia. Por consiguiente el naturalismo de Zola no es solamente una tendencia literaria, sino una nueva concepción del hombre y una forma para estudiar su comportamiento.  El novelista francés para llegar a explicar esta nueva narrativa escribe: «Puesto que la medicina, que era un arte, se está convirtiendo en una ciencia, ¿por qué la literatura no ha de convertirse también en una ciencia gracias al método experimental? El escritor naturalista es, al  mismo tiempo, observador y experimentador. Su misión consistiría en tomar los hechos de la naturaleza, estudiarlos y actuar sobre ellos sin apartarse de la naturaleza. Todo esto nos llevaría al conocimiento científico tanto en su acción individual como social. El mayor éxito novelesco lo consiguió con Nana (1880). Pero también fue importante Germinal (1885).


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.